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PRUEBA DE NIVEL PARA GESTIONAR TALAVERA

Algunos árboles han muerto, otros van de camino, setos, plantas y flores plantadas antes de las elecciones municipales y autonómicas de mayo se secan por falta de agua.

Esta es la tónica general que nos podemos encontrar en nuestros Jardines del Prado, esta, y una obra paralizada, lo genera desconcierto, y cierta desazón porque el impacto visual es brutal.

Inicialmente destaca el abandono que sufre el tramo Arcos-Fuente de las Ranas, no hace mucho se abrió a bombo y platillo para albergar la Feria del Libro. Aquella buena impresión pretendía adivinar lo que iba a ser el futuro de nuestros jardines, otros interpretaron que la aceleración de la obra pretendía contrarrestar réditos perdidos por una controvertida obra.

En la guerra partidista surgida a raíz del proyecto de rehabilitación, nuestra asociación se mantuvo al margen. Preferimos alejarnos de todo ruido mediático apostando por ver el resultado final. Dentro de ese resultado, esperábamos una sobresaliente rehabilitación para nuestras futuras generaciones, y que el conjunto pudiera sumarse a una oferta turística atractiva para nuestra ciudad. Y aquí andamos señoras y señores.

Tenemos todo lo contrario, y quienes levantaban su voz entonces hoy se muestran laxos y tibios en sus posturas. Nos sorprende, además que el gobierno socialista saliente se alegre del enquistamiento de la obra, cuando fueron ellos mismos quienes la iniciaron y desarrollaron en profundidad hasta su inesperada salida del gobierno municipal. Esta es la forma de hacer oposición que siempre han utilizado los partidos tradicionales en Talavera (PSOE-PP), y esa forma de hacer política es la que nos ha llevado a estar donde estamos, cosa que siempre hemos criticado desde nuestra asociación.

Por otra parte no es menos cierto, que el gobierno conservador de coalición entrante parece adormecido ante la magnitud del problema. Da la sensación que se muestra incapaz para solucionarlo, y nos preocupa que las distintas concejalías no estén al nivel de exigencia que Talavera demanda, por lo que el plazo de los 100 días de cortesía se acorta.

Los Jardines del Prado tienen DOS problemas. UNO falta de agua, DOS la obra está parada, ambas son de urgente resolución.

La falta de agua debería ser una tarea sencilla, pero para eso hace falta voluntad y coordinación entre los actores implicados. Bastaría con que al personal de “Parques y Jardines” se le permitiese acceder urgentemente al tramo Arcos del Prado-Fuente de las Ranas con un camión tipo cuba para regar, y que ese mismo personal posteriormente realizase labores de desbrozado y saneado. Esta tarea debería convertirse en una rutina semanal y mensual hasta lograr la recuperación y apertura del tramo expuesto.

Por otro lado, y hasta que se resuelvan los problemas de las obras, ese mismo camión debería tener también acceso al resto de los jardines, para que realizar urgentes labores de regado de todas las especies recientemente plantadas y aquellas que ya teníamos.

Por falta de información no podemos determinar la problemática en la paralización de las obras, podemos intuir que es un problema de financiación entre fondos europeos y fondos municipales, y que por falta de pagos la empresa se niega a continuar con la obra. En todo caso instamos a la nueva corporación su máxima implicación, coordinación, transparencia e información entre las concejalías implicadas, hasta que se consiga la reactivación de las obras de este BIEN DE INTERÉS CULTURAL. Sería positivo, una rueda de prensa informando las causas del problema y las medidas de urgencia que han adoptado hasta su completa resolución.

Podemos afirmar que este es uno de los primeros problemas serios a los que se enfrenta el nuevo gobierno municipal, dado que es muy fácil hacer oposición, pero lo que realmente difícil es gestionar un Ayuntamiento con fondos famélicos, y eso lo deberían de saber tanto cuando gobiernan como cuando hacen oposición.

Esperemos que se pongan las pilas cuanto antes para resolver semejante problema, nuestros Jardines del Prado lo merecen, y nuestra ciudanía también.